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'Llevamos tres años hablando de Brexit y estamos comenzando de cero', afirma Dottie en un evento con Cidob
31/10/2019
El acuerdo de retirada que el Gabinete de Boris Johnson logró con la Unión Europea el pasado 17 de octubre no ha permitido avanzar para conseguir el objetivo de una futura relación que no perjudique los intereses comerciales y económicos. Esta fue una de las principales ideas que Christopher Dottie, presidente de la British Chamber, transmitió a los asistentes durante su intervención en la mesa redonda organizada por Cidob ‘Brexit, ¿última oportunidad?’.
Dottie afirmó que el acuerdo, que todavía tiene que ser aprobado por el Parlamento británico, no es nada ventajoso para la economía ni para el tejido empresarial: “llevamos tres años hablando de Brexit, pero empezamos de cero de nuevo ahora”. Además, se mostró la preocupación de las empresas por el mantenimiento de los flujos de mercancías y, en especial, de personas y talento: “nadie se despierta adulto, con un nivel alto de inglés y cobrando más de 30.000£ al año, que son quienes podrían trabajar en UK. Estos son los lazos que se crean entre España y mi país”, afirmó.
Durante el encuentro, en el que participaron representantes de empresas del sector bancario, fondos de inversión británicos o de colegios profesionales se pudo constatar el nerviosismo existente que hay en todos ellos ante una salida dura. “Si con un Brexit duro se pierde la idea de Londres como ciudad global, el impacto sobre la City será mucho más duro que el de la pérdida de influencia o la fuga de capitales”, fue una de las ideas que se pudieron escuchar.
Una salida dura que puede despertar viejos fantasmas en Irlanda que se creían enterrados. “La policía norirlandesa ya tiene informes y pruebas de que puede haber un rebrote de la violencia por ambos lados en el caso de que haya una frontera dura en la isla”, se pudo escuchar de parte de un experto en Irlanda. Los acuerdos de paz de viernes Santo sirvieron para eliminar ese borde físico y fue el primer paso para la pacificación de la isla.
Y es que Brexit no es solo a nivel político o económico. Tiene muchas aristas, también cultural. Algo que se nota ya en las peticiones de músicos comunitarios que quieren desarrollar su carrera artística, que han comenzado a descender drásticamente tras el referéndum de 2016.
Durante las últimas semanas, desde la British Chamber hemos participado activamente en charlas; ponencias de varias organizaciones y sectores diversos; y en entrevistas con medios de comunicación para explicar la postura de nuestra organización y cómo ayudamos a nuestras empresas.
